La marea de sus movimientos da forma a las durezas de sus deseos. Los niños tienen ganas de divertirse y que mejor sitio que en la Cumbre Tajín 2009.
El deseo de "ser", de tocar, de sentir las vibraciones sónicas en sus cuerpecitos, llega de la mano de los emisarios de la música. Zoé y Babasónicos pasan lista.
En el encuentro de las identidades al pie de la zona arqueológica de la ciudad del Trueno, los decibeles retumban las conciencias de estos niños en este parque de diversiones sonoras en que se ha convertido el llamado Nicho de la Música.
Las aguas traen consigo los primeros movimientos sensuales entre estos muchachitos con ansias de conocer nuevas experiencias, a ritmo de reggae, salsa, cumbia, son jarocho preceden a Elvia, grupo de rock básico con poder inusitado del meritito Xalapa. Babasónicos hace honor a su fama, y levanta a los mismísimos dioses totonacos. Con cada tema la temperatura aumenta, temas como Cuello, Ídolo, El colmo, Pijamas, Risa, arrebatan alaridos que el cantante/pulga aprueba con la cabeza.
Todos conocen estas canciones de un pop acaramelado que por momentos suena a rock.
Por su parte, Zoé recibe el calor de estos miles de chavos coreadores. "Oeee, oe, oe, oeeee, Zoeeee, Zoeeee", como si de un partido de futbol se tratase, hace cimbrar los cimientos de Tajín. Noche redonda; amados los niños traviesos por los acordes y por la cerveza.
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